jueves, 25 de enero de 2018

Receta a Juicio: tarta de Zucchini

Desde hace tiempo tengo pendiente hacer este tipo de tarta salada donde la verdura se corta fina y se coloca en forma de "flor" o espiral, porque me parece que se ven taaaan lindas... Así que aproveché la ocasión que venían a comer a casa y me dispuse a prepararla. .


La receta "original", que cambié un montón pero en fin, es en la que me inspiré, es del facebook de Tastemade Español. Quien quiera verla, puede entrar en el link, la receta que pongo a continuación es la que yo hice.

Ingredientes
- 1 masa brisa (comprada, si tienen tiempo y ganas la pueden hacer, mucho mejor seguro)
- 2 calabacines hermosos (grandes)
- 3 huevos
- Queso feta 
- 1 yogur natural
- Queso rallado
- Sal, pimienta a gusto

Elaboración

- Lo primero es cortar las láminas de calabacín. Yo lo hice con un pelador.
- En un bowl poner el queso feta y lo desmenuzarlo con un tenedor.
- Al queso le añadimos el yogur natural, sal, pimienta, 2 huevos y queso rallado (en polvo o en hebras puede ser).
- Colocar la masa en un molde/bandeja para horno. Redondo, obvio, si queremos que quede esa "flor" de calabacín.
- Verter la mezcla de queso/huevo sobre la masa.
- A partir de acá viene lo difícil: colocar las láminas de calabacín de manera que se forme la florcita. Y digo difícil porque en mi caso no se sostenían y se resbalaban. Yo empecé de fuera hacia adentro, luego de dentro hacia afuera y luego con ayuda fui rellenando los huecos. Como algunos trozos se me seguían "resbalando" batí otro huevo mezclado con queso rallado y una pizca de pimienta y se lo fui tirando por aquellas partes donde quería levantar el calabacín, a modo de soporte.

Tengo que admitir que no le tenía demasiada fe en cuanto la metí al horno... pero a pesar de las complicaciones salió bastante bonita (también tengo que decir que tuve ayuda en casa para poner las láminas de calabacín)



Puede ser que el relleno estuviera muy líquido o que las láminas de calabacín fueran muy finas y por eso costaba montarlo... Tal vez usando un queso de untar en vez del yogur, que es más durito, o haciendo las láminas con una mandolina y un poco más gruesas...Son ideas que se me ocurren que se pueden probar para ver si así es más fácil de hacer.

A parte de que salió linda estaba rica, sí. Pero tengo que admitir que no sé si la repetiría, por lo costoso de montar esa flor. Lo que tengo seguro es que por el momento me conformaré con tartas de las "normales", donde todo va revuelto. Menos estéticas, pero igual de ricas.

Igualmente, si tienen paciencia y tiempo, les animo a probar hacerlo para algún evento o comida con amigos. Queda muy vistosa y, quién sabe, tal vez a ustedes les resulta más sencillo que a mí!





miércoles, 17 de enero de 2018

Receta a Juicio: Sopa de lentejas, curry y leche de coco

Hice esta sopa el domingo a la nochecita (era más bien la tarde, pero si está oscuro ya se puede decir nochecita..) para dejar alguna comida preparada para el lunes y martes, que me esperaban días a full. La cuestión es que no tenía gran cosa en casa y busqué en mis recetas pendientes alguna que no tuviera demasiados ingredientes. Nota: sí, tengo una carpeta en marcadores llamada "Recetas" donde guardo más recetas de las que soy capaz de hacer/comer en un año.

De entre todas me decidí por esta sopa de lentejas, curry y leche de coco del blog "Living las Vegans". Se parece un poco a otra sopa de lentejas que publiqué hace un tiempo, pero esta tiene un ingrediente especial: leche de coco. Y daba la casualidad que hace MESES que tenía una lata de leche de coco y no sabía con qué usarla. Así que me puse en ello, y este fue el resultado:


Yo hice menos cantidad que en la receta original y omití los ingredientes que no tenía (como el apio y el cilantro) y el ajo porque no soy muy fan. La receta original la pueden ver en el link que dejé más arriba, lo siguiente es lo que yo hice:

Ingredientes (2 raciones):
- 1 cebolla
- 1 zanahoria grande
- Lentejas secas (1 vaso puse yo)
- Aceite de oliva
- Un poco menos de media lata de leche de coco
- 1 cucharadita llenita de curry. 
- 1/2 cucharadita de cúrcuma
- Sal y pimienta
- Para servir (opcional): queso cottage. 

Elaboración: 
- Cortar la cebolla bien chiquita y ponerla en una cacerola con una cucharada de aceite de oliva para sofreir.
- Rallar la zanahoria y agregarla a la cacerola.
- Cuando esté la cebolla más doradita (aunque no esté cocida del todo) añadimos el curry y la cúrcuma, y mezclamos bien todo.
- Agregamos las lentejas y cubrimos todo con caldo de verduras (yo usé media pastilla). También condimentar con sal y pimienta.
- Dejamos cocinar a fuego suave hasta que las lentejas estén tiernas, más o menos 30 minutos. 
(Nota: yo hice hasta acá el domingo, dejé enfriar y guardé la cacerola tal cual en la nevera; cuando fui a comer terminé de prepararla)
- Separamos un par de cucharones de la sopa y los ponemos en el vaso de la minipimer (batidora/trituradora). Agregamos la leche de coco y trituramos todo. Volver a meterlo en la cacerola, mezclar bien y calentar (si es necesario) hasta que esté listo. 
- Yo lo serví con una cucharada de queso cottage, que podría haber sido una cucharada de yogur griego, de queso fresco batido, de ricotta o nada. 


Cosas importantes a saber: la leche de coco se separa en dos partes con el frío, una sólida y blanca y una líquida que es como agua. Yo puse un poco de ambas y lo trituré todo. Quedaban como motitas más blancas flotando (de la parte sólida). Cuando se calienta las motitas desaparecen y queda la textura cremosa que se ve en la foto. 

Si sos como yo y todavía no estás habituado a usar leche de coco (era mi primerita vez) te preguntarás qué hacer con el resto de la lata. Tranquilo, a mi me pasó. Y mi solución fue congelarla en una cubitera. Así aguanta más (hasta 3 meses según leí, mientras que fresca tendría que haberla usado esta misma semana) y me da tiempo para buscar otras recetas donde usarla. Ya les contaré.

¿Mi opinión sobre la receta? Muy sabrosa para los pocos ingredientes que lleva, ideal para esos días que no tenemos demasiado en la nevera y tiramos de básicos. Y como a mi hermana, que es quien suele probar mis recetas, le gustó mucho también, seguro que repetiremos.

¡Espero que a ustedes también les guste! ¡Qué aproveche! <3


sábado, 13 de enero de 2018

Alimentación sostenible: propósito 2018

Nuevo año, nuevos propósitos. En estas fechas muchos son los que se plantean objetivos como llevar una alimentación más saludable, hacer más ejercicio o perder peso... pero pocos se cuestionan llevar una alimentación más sostenible.

¿Qué es la alimentación sostenible? Podríamos definirla como la alimentación que es respetuosa con el medioambiente, minimiza el impacto de producción y comercialización, y es socialmente justa. Con los puntos siguientes (que son las medidas que quiero tomar para cumplir mi objetivo) lo van a entender mejor:


- Consumir productos locales y de temporada: esto se aplica principalmente a frutas, verduras y hortalizas, e incluso pescados o carnes. Si compramos aquellos alimentos que han sido producidos en nuestra localidad/región/país estamos evitando el enorme gasto energético que tiene el transporte de alimentos, y a la vez nos aseguramos que el producto va a ser más fresco (si lo traen de fuera tardará más tiempo en llegar a mis manos que si viene de más cerca). Y si es de temporada, los alimentos serán más frescos, más sabrosos (como la fruta madura) y respetaremos el propio ciclo de crecimiento.

Por ejemplo, el kiwi se convirtió en una de mis frutas favoritas. Antes me daba igual cuál comprar (ni me fijaba) pero ahora sólo lo compro si su origen es España, evitando los que vienen de Nueva Zelanda (como el "Zespri"), que queda demasiado lejos. Si no hay o no estoy segura de su origen, prefiero no comer kiwi y comprar otra fruta.

Si la fruta se compre en el supermercado es importante fijarse en las etiquetas y los carteles con la información, donde deberían decir el origen del producto. Si se compra en una verdulería o en el mercado a veces no encontramos esta información, pero podríamos pedirla.

- Evitar envases (sobre todo de plástico): últimamente están de moda los formatos individuales, y las bolsitas de plástico dentro de más bolsitas/bandejitas/cajitas... al final nos encontramos que generamos un montón de residuos. Lo ideal sería comprar a granel todo lo que se pueda y evitar los productos que lleven excesivos envases (yo llegué a ver UNA ÚNICA berenjena dentro de una bandeja de plástico y todo envuelto en un paquete de plástico, totalmente innecesario). Otra medida que se puede tomar es llevarnos nuestra propia bolsa de la compra, así como bolsitas o recipientes para guardar los diferentes productos (por ejemplo para las frutas y verduras, o si vamos a comprar a granel).

- Comprar más en el mercado (y menos en el supermercado): esta es una buena forma de conseguir los dos puntos anteriores sin casi tener que hacer nada; por lo general, en el mercado nos venden alimentos de cercanía, de temporada y sin envases. Además, estaríamos ayudando a la economía local y a los pequeños productores y vendedores.

Como les dije, estos tres son los puntos principales en los que me propuse mejorar este año. Pero la sostenibilidad alimentaria va más allá, y también tendríamos que hablar del aprovechamiento de los alimentos, de no tirar comida y disminuir los desperdicios. Y no nos olvidemos que reducir el consumo de productos de origen animal también tiene su impacto positivo en el medioambiente (pueden leer un poquito más sobre esto acá). Hay muchas cosas que podemos hacer, muchos hábitos que cambiar.


Desde mi punto de vista, la alimentación saludable debe ser sostenible: de esta manera no es sólo saludable para nosotros mismos, sino que también lo es para el planeta. Por muy saludable que pueda ser una papaya, si para que yo la coma la tienen que traer de la otra punta del planeta, con todo el impacto que eso conlleva (transporte, almacenamiento, empaquetado...) no me merece la pena; mejor comer un melocotón o unas naranjas (según temporada, obvio) que se cultivan en donde yo vivo.

Espero que les sirva y que al menos reflexionen sobre su propio modelo de compra y de alimentación. Y recuerden que, por pequeño que sea el cambio, todo suma.

¡Gracias por leer! <3